jueves, 13 de noviembre de 2008

Carta a una amiga

Hola:

Nos encontramos en un café céntrico de la ciudad, uno al que hace años que no iba. Fue curioso verte, la misma niña que fue mi mejor amiga hace 14 años y por casi 5 años, pero con los rasgos marcados de la década de los treintas, un rostro juvenil, pero maduro, unas ojeras no profundas pero perceptibles, y el caminar cansado de un día de más de 10 horas de trabajo; tú lo dijiste, estábamos entrando a la crisis de los jóvenes-adultos con todo lo que implicaba: necesidad de posicionamiento social, un buen suelo, bienes materiales, trabajo en exceso (workaholic) y claro, el estar aún solteros que tiene su peso positivo y negativo. Lejos de alegrarnos con efusividad por los años de ausencia nos saludamos con tranquilidad.

Platicamos de nuestros años de ausencia, y ante el pesimismo que mi rostro y ánimo arrojaban una vez que te platiqué de un momento doloroso de mi vida, me preguntaste con la mirada "¿Dónde está Rubén?" El signo de interrogación vino a mi cara y pensé como Joaquín Sabina "hoy dice el periódico que ha muerto el niño que yo fui..."

Pese a que pasaron muchos años, y hubo muchos cambios, al paso de una hora y media de plática, nos quedamos callados. Sin nada que decir. Era algo incomodo, hasta que comencé a reír, y sólo atine a describir qué extraño era habernos quedado sin plática, después de recorrer los temas más triviales y los lugares comunes: el clima, la salud de los padres, el divorcio de un hermano, los sobrinos. Ambos reímos, caímos en la cuenta de que el tiempo no sólo nos separó físicamente, sino que incluso nos hizo poco afines.

Caminamos al estacionamiento, ambos con la necesidad de que todo terminara, de separar esa incomodad extraña que experimentábamos. Y entonces cada uno tomó su camino. Me sentí como los protagonistas de Y tu mama también cuando al final de la cinta, se toman un café, más a fuerzas, que de ganas, solo por los viejos tiempos.

Al día siguiente recibí un correo tuyo, aplicabas tus clases de tanatología conmigo: me dabas ánimos para no desesperarme, e incluso tuviste la deferencia de contarme lo que te pasó en su tiempo, del cómo sufriste, la ausencia dé, el aferrarse a, el amanecer nublado.

Tienes razón, cuando se experimenta el sufrimiento, pueden pensarse cosas que parecerían descabelladas, intentar ideas hasta suicidas, pero, como razonó Schopenhauer, son totalmente lógicas, y más aún, son un justo derecho.

Sin lugar a dudas es necesario el transcurso de la vida: “el tiempo, mi querido Rubén, lo cura todo”. Sí, pero esas cosas sólo se aprenden por la praxis, rara vez por la teoría.

Me ha gustado mucho tu reflexión de las cadenas, esas malditas cadenas que uno sólo se amarra. Fantasmas del pasado que nos atan. Lo peor es que creemos que alguien nos las pone, cuando somos forjadores de nuestros propios grilletes, cuando somos quienes vemos moros con tranchete, un espejismo de nuestros propios errores.

¿Sabes? Yo siempre he sido muy comunista, en el buen sentido de la palabra. Considero a la comunidad por encima de la individualidad, dentro de lo necesario. Por ello creo en la vida de pareja, común; por eso creo en la necesidad de llevarse bien con la familia política, de decidir de manera democrática, y a veces renunciar a ciertas cosas, si la contraparte las necesita. Siempre dentro de lo normal, lo necesario para no perder tu propio yo. Respeto tu idea de “Mi pareja no es perfecta y yo tampoco, no comparto algunas ideas, pero yo seré responsable solo por mi bienestar y mi dedición de hacerlo que a mi me de la gana en mis tiempos libres…”, es más, la comparto, porque así debe de ser la vida, nacemos solos y solos morimos, pero tengo esa maldita manía del comunismo, de ser sociable. Ya lo decía Pérez-Reverte “Alatriste movió un poco la cabeza, pensativo, y luego miró su espada y su daga. Somos lo que somos, pensó”.

Mi querida amiga, gracias por el apoyo, como tu misma lo dijiste, sin condiciones, gracias por la intención, por las líneas, por las palabras.

Y como dijo el Caballero de la Triste Figura “menester es que yo os ofrezca lo mismo”.


Atte

Rubén

1 comentario:

  1. hoOoOola proOfe coOmoO esta? buenoO creoO que al parecer coOn mushoO trabajoO peroO esperoO y este bn... hace mushoO que noO platicaba coOn usted, y deboO decirle que me sientoO bn cuandoO platicoO coOn usted, mas que un ex proOfesoOr es coOmoO un amigoO al cual estimoO mushoO y esperoO verloO proOntoO para poOder platicar... esperoO y ya noO este triste poOr que sientoO feoO verloO asi... recuerde que la vida sigue y hay que vivirla loO mejoOR que se pueda y ps buenoO ya sabe que para loO que sea cuenta coOnmigoO, hasta para ir poOr usted a la cantina a las 4 de la mañana poOR que se le pasaroOn de coOpas jaja... buenoO proOfe me voOii se cuida mushoOo mushoOo

    bye

    kiisseess XD

    ♥nath♥♫♪♫♪

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